sábado, 31 de octubre de 2015

¿Somos incompetentes?



Mirando la imagen, no nos debemos de asustar. Y sin complejos debemos afirmar que tiene todo el sentido del mundo. ¿por qué? Porque no podemos saber de todo. Y más en esta época de gran información. Sería increíble y sería probabilisticamente casos raros, esto. Ya no es posible tener y disponer de ese conocimiento que en otras épocas de la historia sí que acontecía.

Por eso, el ser incompetentes no es óbice ni sinónimo de ignorancia. Lo único es tomarlo como que no sabemos. Y sólo sí queremos aprender, ya sabemos lo que tenemos que hacer. Motivación, tiempo y práctica sobre el tema que nos resulta curioso. Solo así empezaremos a tener competencia en dicho tema.

Lo que no se puede permitir y menos en las organizaciones es tener incompetentes negligentes. Porque esto ni quieren ni saben ni dejan. Esa es la principal diferencia de todo.

Así que cuestiónate todo. Y si quieres ser competente en algo, ya sabes, practica.



viernes, 30 de octubre de 2015

Eres más inteligente que la empresa para la que trabajas


Esta charla TedxUDP es todo una joya de conocimiento y aprendizaje. Y no sólo por el contenido sino como es Javier Martínez Aldanondo. Todo un caballero cuyo objetivo es hacernos pensar y que nos hagamos preguntas sobre nuestro devenir.

Aprovechando la ponencia del día 12 de Noviembre le he pedido su permiso para indicar diferentes referencias suyas. Y no sólo me ha concedido el mismo sin ningún reparo si no que me ha alentado a continuar mi camino y ojalá nos podamos encontrar en algún evento y poder debatir y dialogar de ese tema que nos apasiona a ambos. El conocimiento.

Muchas gracias Javier, todo un lujo.


            
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jueves, 29 de octubre de 2015

Nuestro mejor maestro nuestro último error


Todo está en nosotros, no hay duda. Podremos apoyarnos en lo que queramos pero al final somos nosotros con nuestros problemas. Cuando antes tomemos conciencia de ello, antes tomaremos el camino para resolverlos y aprender de esas experiencias negativas.

Todo tiene que ver con la actitud


Con nuestro compromiso
Con nuestro sacrificio
Con nuestra disciplina
Con nuestra perseverancia
Con el querer hacer
Con el querer mejorar
Con el querer compartir
Con el querer comunicar
Con el querer avanzar
Con el querer desarrollarse
Con el querer hacerlo mejor la siguiente vez
Con el querer ser mejor profesional que ayer


Por eso, debemos aprender de ese maestro, que nos dará la llave para hacerlo mejor la próxima vez




¿Todo vale?



¿Todo vale en aras de conseguir algo?. Se nos plantea siempre esa pregunta en nuestras vidas, en nuestros trabajos. Todos hemos oído por ejemplo que todo vale en el amor y en la guerra, pero ¿es moral?, ¿es ético?. También hemos oído que no basta con triunfar, nuestro enemigo ha de perder. Así nos hemos educado en el "todo vale", que por conseguir un fin, no nos ha de preocupar lo que atropellemos, lo que dejemos atrás.

¿Y entonces donde queda la moral, la ética?. En nada, en solo papel mojado, en nada mas que unas ideas que leemos, que jamás llevamos a la práctica. Hay una frase de Bertrand Russell que dice: 

"La humanidad tiene una moral doble: una que predica y no practica y otra que practica y no predica"

Así veo yo la sociedad actual, predicando valores, buenas maneras, buenas formas de actuar, pero que al final no son llevadas apenas a la práctica y otro tipo de actuaciones, de moralidad, implícita en todo y todos, que se ejecuta a diario y que sin embargo, no se aconseja, no se predica hacer. 

¿Cambiar esta tendencia es fácil?
¿Se puede hacer?
¿Existen personas que realmente obran según predican?

Hay otra frase de Jalil Gibran en la que nos dice que:

"Aquel que no no usa su moralidad sino como si fuera su mejor ropaje, estaría mejor desnudo"

¿Usamos la moralidad, la ética como motor en nuestras vida, en nuestros trabajos?

Todos conocemos casos donde no ha importado quien tenemos enfrente, a nuestros lados a la hora de conseguir un objetivo. Conocemos casos donde un profesional valido al 150% ha sido ninguneado por cubrir nuestra incompetencia, hasta lograr que abandone, en lugar de colaborar, de trabajar juntos. Y todo por ese "gran beneficio" que vemos en el horizonte. Y sin darnos cuenta que esa maravilla que vemos relucir está hecha en realidad de papel en lugar de tener sólidos cimientos. ¿Tan difícil es de ver?, ¿cuesta tanto reconocer que solo caminando juntos, teniendo bases solidas y compartidas se logra alcanzar metas inamovibles?. Parece ser que si que cuesta....

Puede que sea la educación que recibimos la causante de todo este, a mi parecer, desatino. Nos enseñan a ser competitivos, a luchar por una casa, por un trabajo, por una "felicidad" quizás basada en unos principios morales que no lo son. Y nos hacen creer que eso es lo correcto, que todo es valido para nuestras metas. ¿Pero esto debe ser así?. Mijail Bakunin lo expresó asi:

"La libertad, la moralidad y la dignidad humana del individuo consisten precisamente en que haga el bien no porque este forzado a hacerlo, sino porque libremente lo conciba, lo quiera y lo ame"

¿Realmente lo concebimos así? ¿No es mas bien algo que nos imponen desde fuera? ¿algo que el pastor del rebaño nos dice y que los perros nos indican como seguir?




miércoles, 28 de octubre de 2015

"El arte de Aprender"



Ayer mi hija pequeña Gabriela me bombardeó con una serie de preguntas encadenadas y repetidas con sus por qués correspondientes. A su vez, esto me trajo visualizar una de aquellas excelentes entradas sobre el aprendizaje de Javier Martínez Aldanondo que tengo ubicadas y salvaguardas para volver a leer. Son totalmente oro. Todo un tesoro. No tengo dudas de ello.

Y con ambas ver sus nexos de unión. Y que verdad tiene sus aseveraciones. Todo cobra sentido. La relación queda establecida en la experiencia. El más común de los sentidos.  

Veamos alguna de estas aseveraciones: ¿El conocimiento tiene fecha de caducidad?

La institución académico dirá que no. Que los nuevos aprendizajes rellenarán aquellos que ya tenemos insertos y asimilados. Pero, realmente creo que esto no es así. Si lo aprendido o las experiencias acumuladas tiene que ver con unos puntos de vista. Y si estos, están desfasados, todo aquello aprendido realmente está ocupando un espacio en nuestro cerebro totalmente inservible.

Imagínate que eras todo una eminencia en el Windows 95. O atesoras una enciclopedia de los años 90. De qué te servirá para tu vida actual dicho saber o conocer. Realmente no te sirva absolutamente para nada. Por ello, tal y como comenta Javier, cuando para diferentes cuestiones obtenemos respuestas acertadas estas dejan de tener vigencia porque las preguntas ya son otras.

Por esa razón, afirma su alegato que es más importante infinitamente, plantearse preguntar qué obtener sus correspondientes respuestas. Y si damos por hecho esto y miramos cómo nos han enseñado o como se enseña actualmente alineados a esos magníficos sistemas educativos implantados e impuestos que se cambian cada dos por tres.

¿Estamos educados o hemos sido enseñados o educados para responder a cuestiones más que realizar planteamientos o preguntas? 

Esa es la principal razón de que nos cueste tanto hacer preguntas. Pero la capacidad es innata. Solamente es cambiar el enfoque y la forma de enseñar o de enseñanza. Por eso, ante cualquier problema que no tengamos una solución conocida, todo se nos hace cuesta arriba. Y nos ahogamos en un charco sin apenas fondo. 

Sí a esto encima, tenemos un sistema educativo que lo que realmente mide nuestros niveles de respuestas más que de preguntas. Así por evolución nos pasa lo que nos pasa.

Es genial el camino y como Javier circula y te guía en algo que suena totalmente verdadero. Y solamente parando un poco. Pensando sobre el tema. Y forjando experiencias sobre lo que nos rodea, vemos que tiene todo el sentido del mundo.

El aprender y el aprendizaje es todo un arte. Y su maestría y a los que se dedican a ello, les deberían no solamente hacer un gran monumento sino que su profesión debería estar o ser sino la más respetada una de la que más debería representar dicho estado.


El cementerio de la Información



Vivimos actualmente en un mundo donde la cantidad de información está totalmente desbordando el vaso. Es imposible poder conseguir aglutinarla y menos explotarla. Y por otro lado, aquella que puede ser vital para nosotros la dejamos de lado, sin gestión y sin mantenimiento. No es un gran paradoja.

Hablamos de sociedad de la información. De sociedad del conocimiento. Pero qué hacen realmente las empresas para salvaguardar aquella información estratégico o conocimiento estratégico básico y fundamental para crear ventajas competitivas. Lo deposito, sin gestión, en unas herramientas, dónde nadie lo lee, ni las busca, ni las actualiza, o esto ocurre como particularidad. ¿Por qué ocurre esto?

Ya que aparte de que no haya reconocimientos y recompensas no existen realmente políticas para gestionar todo esto. Solamente se quedan en palabras vanas. Eso sí, el que adopta esas herramientas le dan un medalla. Alucinante. 

Además, un práctica común, ya que no hay políticas ni cómo se debe actuar, almacenamos en local, en la intranet, en las unidades de red, en otras herramientas corporativas, la misma información y cómo no hay gestión de la misma, sí alguien - algún bicho raro - le da por consultar algún documento y, lo encuentra, no tiene la certeza absoluta que la misma esté o no actualizada. ¿Cómo es posible qué ocurra esto?

Realmente, disponemos de "Cementerios de la Información" en los que hemos invertido gran cantidad de dinero. Seguimos invirtiendo dinero y dinero para su almacenamiento dándole cada día más capacidad, para realmente no utilizarlo nadie.

Y lo más curioso que muchos a estos cementarios de la información les llaman Gestión del Conocimiento. Ustedes mismos, con sus ideas y percepciones. Pero, con lo fácil que se puede resultar hacer las cosas y, encima teniendo los recursos que se invierten, que no se hagan nada por ser efectivos, eficientes así como les sirva a las organización a aprender de forma continuada.



martes, 27 de octubre de 2015

¿O estás en el sistema o estás en el sistema?



Odio al sistema. Y sus manejos. O estás en él o estás en él. Sus tentáculos son enormes y largos y es imposible zafarse de su garras. Hoy he tenido otro enfrentamiento con el mismo. Y es que si quieres expresar lo que tu capacidad y conocimiento tienen por tu estudio y dedicación no te deja. Y entonces  cierra puertas en banda.

Es totalmente asqueroso. Mezquino. Insufrible. Y me rebelo ante él. Al final tendremos que irnos a Marte para perder su influencia y control. Lo políticamente correcto estoy cansado de ello. No hay ética. Ni valores. Ni nada. La sociedad evoluciona por inquietudes de gente. Y el sistema quiere que todo permanezca igual.

¿Qué se puede hacer? Lo único combatirlo pero las consecuencias no sólo las sufre uno en sus carnes sino a todo lo que te rodea. 

¿Cuándo cambiará esto? ¿Cuándo nos juntaremos unos cuántos y quitaremos a aquellos como en la figura manejan a su antojo? Madremía. Nada más quiere que seamos ovejas y mansas, sin inquietudes, sin palabras.


lunes, 26 de octubre de 2015

El fin jamás debe o puede justificar los medios



Jamás o intentaré jamás juzgar por qué razón alguien hace lo que hace. En el caso de ayer, entre el hacer de Rossi y Márquez. ¿Quién tiene la verdad? ¿Quién se comportó bien? ¿Quién lo hizo mal? No debemos entrar en ello. Cada cual, con lo realizado. Y sí las acciones de los que debieran marcar las fronteras, han hecho bien en esa sanción, si tenía que haber sido más grande, o menor.

La cuestión, es que el ejemplo viene al pelo, de que "El fin jamás debe o puede justificar los medios". Para algunos el mito, se ha caído por tierra de su pedestal. Algunos dirán ya no quiere ser como ... El tener alguien como referente y que nuestro comportamientos se intenten adecuar a él, está bien. Pero siempre, lo más importante, es que los principios y valores. Las virtudes, sean de ejemplo.

En el momento, que valga todo, por conseguir encima algo que ya disponía de él. Hace que uno pierda todo lo sembrado desde que se inició su carrera. Jamás la autoridad formal podrá con la autoridad moral. Y eso, aunque nuestro ego nos incida que no pasa nada. Si no nos arrepentimos de acciones que dejan mucho que desear, eso permanecerá en nuestro cuerpo y en nuestra mente y limará lo más grande hasta ahora conseguido dejando un hueco. Una oscuridad. Un hecho, que solamente con el perdón, o siendo valientes decir la verdad puede reestablecer lo bueno en lo que se disponía y era ejemplo para muchos.

Por ello, me dá absolutamente igual quien tenga razón o no. Solamente los intervinientes lo saben. Y son ellos y solamente ellos, los que deberían dar ejemplo y ser valientes sobre todo ante equivocaciones. Que todos las tenemos.





¿Aprendemos al ser curiosos?



Yo no tengo ninguna duda de ello. ¿Cuál es nuestro principal problema de adultos? El principal problema que hemos perdido o hemos olvidado nuestra curiosidad por aprender, por experimentar, parece que nos hemos olvidado de cómo se aprende. Por lo que ante cualquier problemática y circunstancias se nos pone cuesta arriba todo. En vez de pararse. Reflexionar. Preguntarnos. Y tener curiosidad por probar y experimentar.

Se nos ha ido de nuestra memoria, de nuestro cerebro aquel instinto de preguntar esos ¿Por qués? No se acuerdan. O para los que tienen niños, han olvidado aquella época en la que ante una necesidad o una curiosidad imperiosa por saber, denotábamos una batería de preguntas. Y a cada por qué, venía otro y otro, hasta saciar nuestra necesidad.

Por eso, aprendemos al ser curiosos. Y deberíamos volver a experimentar a pensar y cuestionar como niños. Reflexionen sobre el tema. Y volveremos a ser creativos e innovadores. Porque solamente cuando hay inquietudes y se sobrepasan es cuando evolucionamos, crecemos y nos desarrollamos.

sábado, 24 de octubre de 2015

El espíritu de la buenas prácticas


¿Cómo explicar lo que uno siente cuando intenta llevar a cabo las buenas prácticas?


Todo estriba a como uno eleve dicho concepto del hacer. La propia motivación que uno se auto estimule cuando cada día uno se enfrenta a su jornada diaria. A como haciendo volar la imaginación a ese lugar donde la posible creatividad te hace ser y sentir de forma diferente.

Hay muchos que lo refrendan con hacer lo que venga. Pero por qué no hacer e ir más allá de lo que pueden responsabilizarte. Por qué no tener en el detalle más fino, el valor que todos quieren que les generes. Por qué no hacer el ser profesional y tu profesionalidad un arte. Por qué no ir siempre que se pueda unos metros más allá que otro no quieran hacerlo.

Luego las realidades pueden ser diferentes pero nuestra predisposición siempre debe estar ahí para la que se le requiera. Uno de los sentimientos, que siento cuando más que hacer las cosas bien, haces lo que uno considera correcto es lo que representa cuando oigo la siguiente canción.

Aparte de la carga emocional de su historia. Lo fantástico es que vuelan o pueden volar hacia lugares donde se puede encontrar lo mejor de uno. Cuando uno está en dicho instante, conecta con el espíritu de la buena práctica, y eso lo hace todo. Ojalá que todos los que amáis nuestra profesión y las buenas prácticas descubra y conviva con dicha espíritu y se funda en él.




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Gracias por ser mi alma gemela



El aprendizaje según me lo mostró el Sr. Javier Martínez Aldanondo porque lo ví de él, es "acumular experiencia reutilizable en el futuro". Y de ello, cada día, cada jornada de trabajo comparto con un caballero, experto - aunque algunos no lo quieran ver - esas experiencias, esas prácticas, que sean mías, sean suyas, sean de otros, nos inciden a reflexionar sobre las mismas.

¿Para qué? Para aprender o la próxima vez que me enfrente a ellas, o teniendo constancia de lo que le ha pasado a otros, tener unas premisas básicas para actuar y no con experiencia cero. Su conocimiento excelso, es a veces, por desconocimiento nada o poco utilizado, por percepciones de gente, que a su vez, no sabe ni siquiera lo que tiene enfrente de sus ojos.

Todo esto aparte de como profesional, todo lo que tiene de alto, lo tiene de corazón. El ver como se desgarra su motivación, aunque se tiren en nuestra escalada todos los arneses que hagan falta, me da pena de cómo está nuestro sector y de muchos responsables que no saben ni dónde tienen la mano izquierda ni la derecha, pero se siente fuerte, por la manada de sátrapas e incompetentes que le/s dora/n la pildora, para aseverar cosas, que no son reales.

Todo esto me lo podría ahorrar, pero me considero una persona que ante mis millones de defectos, tengo unas poquitas virtudes. Y entre ellas, es la de reconocer a mi alma gemela. A una persona, a un profesional, del que todos los días aprendo y aprendo. De sus inquietudes, de sus propuestas, de su forma de ver el mundo, de su forma de interpretar las buenas prácticas y la gestión de servicio. Una gestión como debiere ser.

Pero, ya sabes, que el que se expone aunque tenga razón siempre tarde o temprano le vienen consecuencias. El que por encima de todo, se predispone a hacer y decir, aunque no sea políticamente correcto. Aquel, que prevalece los principios y valores frente a todos. Desde mi pequeña persona es necesario, reconocerle sus hechos, mi incondicional apoyo - inclusive se ha dado que por nuestra amistad ya he sufrido y sufro consecuencias de algunos negligentes e ignorantes de lo que tienen en sus manos. 

Así que, por todo ello, mi apreciado Gonzalo, te doy las gracias por el aprendizaje que me has inferido en cuestión de virtudes y artes que parecen de reinos de otros tiempos y, que en estos que corren no se valoran ni parece que se quieren.

Siempre a tu disposición, amigo.



Quiero tener un perro: ¿Qué repercute todo eso?



Hoy me he levantado muy pronto para ser sábado. Sobre las 7:00 estaba danzando para llevar a cabo, dos tareas. Una de ellas, era la de seguir preparándome - ensayar, grabarme y medir tiempos en su realización - la ponencia "Aprender a través de la experiencia y del error" que realizaré el día 12 de Noviembre y otra preparar una clase de aprendizaje y conocimiento para mi hija mayor, Nerea de 11 años. En su pretensión del objetivo que ella tiene. Y que no es otro que quiere un perro. Un husky.

Ambas tareas están íntimamente relacionadas. Ya que sí consigo llegar con mi mensaje a mi hija. Quiere decir, que podré llegar a la audiencia que tenga en mi ponencia dicho día, con el mismo tema, con el mismo método. Hace que mate dos pájaros de un tiro, con el mismo tiempo, además del posible aprendizaje que tenga uno encima con dicha experiencia. La de hoy y de la que tendré dicho día con su resultado.

Un husky. Precioso. Pero mi postura, no quiero tener perros en casa. Me gustas pero no se dan las circunstancias. Pero como esto le está afectando a los sueños de mi hija. Y mi hija es todo un sueño para mí, por muchas circunstancias, he buscado en la empatía y la sinergia en ponerme en su forma de pensar y actuar, para hacer concesiones siempre y cuando ella, también realice otras. 

Es un consenso. Un común acuerdo, para que se beneficien las partes. Y además de partes, aunque tenga 11 años, vaya aprendiendo que son las buenas prácticas, sepa que es hacer una estrategia para cumplir y hacer realidad sus objetivos haciendo un plan conjunto.

¿Es una locura enseñar buenas prácticas de gestión a una niña de 11 años? Rotundamente pienso que NO. ¿Por qué? La razón y el sentido común da la respuesta. Lo que le estoy enseñando es a como planear un sueño e intentar hacerlo realidad, viendo sus pros y sus contras. Aprender a priorizar. Aprender a medir. Aprender a mejorar. Aprender algo que le servirá para toda su vida, cuando se tenga que plantear una experiencia de como crear o conseguir un objetivo o un resultado, propio o para otros. Por ello, no es nada descabellado.

Cosas que a veces a mis compañeros en el trabajo con tres o cuatro veces su edad es totalmente imposible hacerles ver, por sus creencias y falta de motivación y ganas de salir de sus zonas de confort. Con mi hija ha sido toda una experiencia gratificante, con unos resultados muy satisfactorios. Ahora, le queda, llevarlos a la práctica. La práctica que a la primera a aprendido, porque tenía motivación - quiere un perro - tiempo porque ha dedicado a escucharme y participar en el aprendizaje mutua así como ha practicado. Esos tres elementos que hacen que aprendamos.

¿Qué ha aprendido?


Qué es un objetivo. Porque un objetivo debe ser específico, medida, alcanzable, realista y conseguible en un tiempo oportuno. De mis ejemplos, se ha pasado a plantearse ejemplos de sus inquietudes. Por lo que he dejado yo de hablar y ella mientras hablaba estaba experimentando la magia del aprendizaje y sin darse cuenta ponía el "REC" para insertar dicha información y promover y generar conocimiento y enlazar otro tipo de pensamiento y sentimientos y darle relación con lo nuevo.

Hemos pasado a tener que quiere un perro y unas circunstancias y qué cosas debe hacer no solo tener motivación, tiempo y práctica. Sino actitud y compromiso con lo que quiere. Y qué va a sacrificar para obtenerlo. No solo ver luego el cómo hay que hacer para cuidarlo.

Hemos pasado, qué tiene que hacer para conseguir su objetivo o su sueño. Entonces han aparecido eso que muchas veces han visto, leído, escuchado o hecho. ¿Dónde estoy? ¿Dónde quiero estar? ¿Cómo llegar? ¿Cómo saber que estoy llegando o llegado? Ha adquirido la palabra GAP o "brecha" como su amigo. Ella me ha comentado que es ahí donde ve la diferencia de todo lo que vaya caminando, y cómo se va acercando a su meta. Y cómo hacer, para seguir con su plan establecido o hacer correcciones sobre el mismo, para volver a seguir caminando, medir y ver con sus propios ojos, lo que le queda o le quedaría por recorrer para alcanzarlo.

Estaba siendo una situación mágica en la que dos personas, ya no padre e hija, podrían haber sido dos profesionales, o un cliente y un proveedor, se planteaban preguntas para conseguir una meta u objetivo común, haciendo tareas como uno solo.

El PDCA además con su buen nivel de inglés, le ha resultado no solo entendible sino que ha cogido un folio y me ha comentado el siguiente ejemplo antes de hacer el plan para su objetivo. El husky.

"...lo que quieres decir papa es que sí por ejemplo mi objetivo fuere tener un juego de consola y este costara 100€. Y yo ¿dónde estoy? es que tengo 30€ y como tengo que conseguir 100€ para satisfacer mi objetivo. Mi brecha es de 70€. Como me has dicho que no me vas a dar nada. Tengo que pensar en como conseguir 70€ para conseguir el objetivo. Si la abuela me da una propina que al mes tengo 10€ y los ahorro, entonces en 7 meses podría conseguir mi juego. Eso sí, si no me gasta nada. Ya que si me gasta de los 10€, 2 entonces tendré que "re-planificar la medida porque la brecha crece".

Os lo prometo. Mientras que mi hija me comentaba eso, me ha salido una lágrima, de cómo se puede conseguir, concienciar y hacer cosas en común. Solamente hace falta, querer por las partes. E idear y soñar de manera conjunta para hacer y conseguir cosas. 

Dos cosas, más. Le he explicado que la vida no existen ni éxitos ni fracasos. Porque solamente hay experiencias positivas y negativas. Ya que, sí se queda cerca del objetivo aunque no lo alcance en su totalidad con sus recursos y capacidades, algún benefactor le ayudará en lo que le resta. ¿Por qué? porque todo lo ha hecho, con motivación, tiempo, práctica, actitud, compromiso, sacrificio y perseverancia.

Y dos, le he explicado los costes indirectos. Su sueño, no solo cuesta un dinero. Sino que luego hay que mantener a su sueño. Y esto, tiene sus gastos. Vacunas, mantenimientos, sacarle a pasear, darle de comer, etcétera, etcétera.

De nuevo, me ha vuelto a sorprender. "...papa para entenderlo con mi ejemplo. Es como si el juego de consola no solamente costara 100€. Imagínate que este juego solamente lo vendieran en Estados Unidos en una única tienda. Entonces a los 100€ tendríamos que añadirle el coste de ir a Estados Unidos para comprarlo en la tienda". En mis adentros he pensado, esta me quita el puesto de trabajo como siga así.

Así que con todo esto. Hemos hecho en una A4 un plan para teniendo cómo objetivo su husky cómo obtenerlo. Ha cogido celo y me ha invitado a ayudarla para ponerlo en su habitación y ponerlo a la vista, para que cada vez que entre en su habitación le recuerde y no se olvide de lo que tiene en mente y quiere obtener.

Como comprenderéis aparte de que se me caiga la baba, podréis identificar porque me gusta tanto el aprendizaje y el conocimiento y a veces, si se dieran las condiciones laborales correctas, creo firmemente que podría generar mucho más valor del que puedo conseguir a mi cliente y a mi empresa. Pero esto, ya no puedo hacer más de lo que hago. Espero que ellos, también lean estas palabras y se conciencien que con lo mismo - con lo que me pagan - pueden conseguir más de lo que lo hacen. Permitiendo hacer. Ya que el hacerlo, para mi más que una obligación es un propósito.


jueves, 22 de octubre de 2015

Principios o Finales

A raíz de unas geniales entradas de Juanjo sobre cuestiones de qué es la ética y su ámbito, me ha venido a la cabeza hablar de los principios. Íntimamente relacionado con la ética de las personas, pero distinto.

Cuando hablamos de ética normalmente nos referimos a esos valores universales, que en condiciones normales, todos deberíamos seguir. Son conceptos generalistas.
Los principios son conceptos puramente personales. Todos tenemos una serie de principios. Estos han de cumplir unos requisitos, o al menos a mi me parece, entre el que destaca que sean éticos.

El debate que aquí quiero abrir es si bien, se reconoce que todos debemos de seguir siempre la ética definida, ¿debemos seguir nuestros principios en todo momento?

En mi opinión, esto no es siempre así, mas bien al revés, los principios parecen que se olvidan con demasiada frecuencia, no se siguen a no ser que interese.

¿Y si perdemos de esa manera nuestros principios, si los hacemos mercenarios del sol que mas calienta, que nos queda?

¿No deberíamos seguir nuestros principios de acuerdo a la ética?

¿Tan difícil de ver es que si perdemos el principio estamos llegando al final?




Y termino con una frase que he encontrado por Internet y que me ha llamado la atención, que unifica principios, moral y liderazgo:

"Si no tienes principios morales te podrán temer pero no respetar"

martes, 20 de octubre de 2015

I dreamed a dream



I dreamed a dream. Soñaba un sueño. En el que las prácticas funcionaban. Así como las lecciones aprendidas. Así como el trabajo en equipo. En el que no se escondían los errores sino que se sacaban a la luz y entre todos, se ponían manos a la obra, primero a encontrar su causa raíz y segundo buscando las posibles alternativas se seleccionaba una, que una vez adoptaba erradicaba para siempre dicha causa.

Se optimizaban las peticiones de servicio y se registraban convenientemente todas las incidencias, para entender y comprender cómo funcionaban los sistemas. Intentando generar valor a los clientes. Aportando, colaborando, comunicando, siendo sinérgicos en cada momentos para solventar las necesidades.

Y se disponía esa organización que aprende a realizar un viaje diario de forma brillante, cuya tripulación con entusiasmo aprendía de sus errores y generaba buenas prácticas con sus éxito. Y donde la gestión del conocimiento era uno de los bastiones fundamentales de las organizaciones.

Dónde se identificaban los conocimientos críticos, se cuidaba el talento y se establecían políticas para discernir nuevos talentos de profesionales teniendo la misión de desarrollarlos y capacitarlos. Era todo perfecto, hasta que uno se despierta por el vecino del cuarto. Y me doy cuenta que el espíritu del método, de los marcos y de las normas ha desaparecido y todo realmente era un sueño que soñaba.

En ese instante, sin saber que me encontraré hoy, si lo del sueño o algo radicalmente opuesto, uno de nuevo viene dispuesto a hacer como sabe y como le dejan. Con la intención de aportar y aprender. Y mientras que incidía en dichos pensamientos me acordé de esa gran canción que reside en la obra de "Los miserables". I dreamed a dream

Seguro que la han escuchado un sin fin de veces. Pero sí esto no es así, se la acompaño en el siguiente vídeo de Britains Got Talent. Que la disfruten y que les haga soñar y viajar con lo que esperan o les haga por unos minutos soñar con sus propósitos.



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lunes, 19 de octubre de 2015

¿Cómo nos podemos convertir en una organización que "aprende"?



¿Cómo nos podemos convertir en una organización que "aprende"?


Se podrían hacer muchas cosas. Se habla de hacer muchas cosas. Pero, realmente qué hacemos con ello. Se lleva a la práctica o se dispone por parte de las organización de un Sistema de Lecciones Aprendidas. Gran cuestión, que el sentido común confirma que es factible y totalmente rentable, pero lo que realmente ocurre es muy diferente. Y en muchos casos, todo se queda en intenciones.

Y lo creo, porque primeramente no se entiende que es una "lección aprendida".

Ante una experiencia que nos ocurre, cuyo resultado no sea satisfactorio. O no lo sea, como lo habíamos estimado, no sirve con reflexionar sobre el asunto y dejarlo por escrito. Eso no es una lección aprendida.

Realmente, cuando se certifica que hemos aprendido una lección, es cuando, una vez reflexionado por todos y llevadas un tipo de acciones al respecto, cuando se vuelve a dar dicha experiencia, su resultado es más óptimo que la vez que lo hicimos anteriormente.

Eso sí, que es tener una lección aprendida por todos los interesados. Pero, realmente qué ocurre en las organizaciones. Que en su caso, como mucho, se realiza un informe para salir del paso y, nadie realmente aprende. No se identifica, qué hicimos bien, qué hicimos mal. Qué podríamos haber hecho. Qué haremos la siguiente vez. ¿Y qué ocurre? que nos vuelve otra vez, dicha experiencia y lo volvemos a hacer igual o peor.

No solamente nos estrellamos una vez con la piedra. Sino de forma continuada, nos seguimos dando de bruces con la misma. Y más que intentar aprender parece que sí hay alguna política es más para esconder que para sacar a la luz nuestros errores y aprender de ellos.

Por eso, es fundamental tener conciencia de las cosas. De los conceptos. Y entre todos, trabajar en una misma dirección. Pero para ello, debe haber un liderazgo y una profesionalidad que a veces, brilla por su ausencia. Salvo en casos, en los que organizaciones con poco método y sí muchas concienciación y compromiso, poco a poco y paso a paso, van aprendiendo a hacer las cosas mejor.

jueves, 15 de octubre de 2015

Aportando mi granito de arena en el evento de la Sociedad del Conocimiento


El 12 de Noviembre se celebra en Madrid, en el Teatro Centro Cultural Pilar Miró - sita en Plaza de Antonio María Segovia - un gran evento cuyo lema es "Sociedad del Conocimiento: Progreso, Innovación y Bienestar" organizado por la Fundación Gestión del Conocimiento en el que tengo la fortuna de aportar mi granito de arena con una charla cuyo título será el de "Aprender a través de la experiencia y del error". 

Su objetivo no es otro que el de promover la difusión y el intercambio de conocimientos con la participación de diferentes personalidades y expertos dentro del ámbito educativo, científico y cultural.

El programa, las conferencias, sus ponentes y sus horarios los podéis ver a continuación. Yo me siento como un niño rodeado de dichas profesionales de renombre pero eso no estriba a que lo que haga lo intente hacer bien, en aquello que es mi gran pasión que no es otro de comunicar y difundir eso a lo que le dedico bastante de mi tiempo diario. El conocimiento, su aprendizaje y como no, su gestión de este activo intangible y muy necesario hoy en día, en cualquier sector, en cualquier organización.

Su entrada es libre hasta completar su aforo. Así que, al que le interese que se lo apunte en su agenda. Puede ser una gran jornada de Conocimiento.



Para terminar me gustaría agradecer a Ángel de Mora - Presidente de la Fundación Gestión de Conocimiento Web de la Fundación y Presidente de la Plataforma Valores, Conocimiento y Cultura, por su invitación y apostar por mi persona para ser ponente de este evento. En dicho link podéis ver que hace dicha fundación y cuáesl son sus objetivos.

No faltéis!!!!!



miércoles, 14 de octubre de 2015

Vidas de un periodista encubierto


¿Qué harías como profesional para sacar a la luz toda la verdad de lo que acontece?


Creo que es muy sacrificada su historia y sobre todo vivir en un anonimato constante por conseguir algo que el personal puede que aprecie en un primer momento pero luego quede en el olvido cuando para obtenerse han pasado horas, días, meses e inclusive años para disponer de la misma. Aventurero y sacrificio que debería tener algún beneficio más que el propio dinero que se saquen de sus exclusivas en pro en la mayoría de los casos, para la sociedad.

Antonio Salas así es su pseudónimo es un claro ejemplo de alabanza. Y la historia que se comenta en esta magnífica charla TEDxMadrid 15 creo que no tiene desperdicio y en cierta forma cada uno deberíamos hacer algo así por esa sociedad y destapar toda la bajeza, falta de ética y abusos que campan a sus anchas si no fuera por estos héroes anónimos. Ejemplar desde mi punto de vista.



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¿cuándo debes enseñar algo cómo puede saber sí se aprende?



Una de las cosas que son claras es que no se necesita realizar ningún examen, ni sean concluyentes el determinar  ni notas ni certificaciones del que recibe la enseñanza. Eso le podrá valer al sistema pero no al proceso de aprendizaje ni a la asunción por la experiencia realizada de conocimiento.

Y el factor principal cuando te pones delante de alguien a enseñar o comentar algo que otros deben conocer, es que tú hables menos de lo que en principio vienen a escucharte. Sí durante el periodo que dura la enseñanza ellos hablan más, significa que el tema tiene de su interés. Y entonces en base a su experiencia e inquietudes pasadas hablan, conversan, dialogan, discuten, se posiciones. Y el maestro, o el que enseña, solamente debe moderar y seguir animando de ese diálogo.

Porque lo anterior lleva a la reflexión, a querer expresar por los enseñados sus pensamientos, sus sentimientos sobre el tema a tratar. 

Hay muchos cursos, en el propio colegio, que la gente se ha acostumbrado a que uno hable y el resto escuche. Así no hay aprendizaje. Porque primero puede que no estén motivados porque no les interese el tema y encima estén obligados a oír. No escuchar. Sin práctica y sin interactuar no se produce aprendizaje. Y las preguntas que son la base del aprendizaje, solo se quedan en respuestas que el maestro, profesor o el que enseña quiere transmitir.

Y esas respuestas al no tener ningún interés por parte del alumno porque no se han planteado las preguntas correctas se quedan en el obstracismo.

Ayer en una pequeña formación pude evidenciar esto. En una temática que ni sabia el conocimiento ni la experiencia sobre el tema, ni la motivación ni las ganas por aprender lo que les tenía que contar, más del 70% del tiempo hablaron los que debían recibir mi charla, con sus experiencias vividas sobre el tema.

Así que lo único que tuve que hacer fue guiar sus preguntas e inquietudes a lo que les quería enseñar y el tiempo y el diálogo lo hizo o hizo el resto. 

¿Para qué profundizar en algo que puede que no les interesase? Ahora déjales que se interesen y luego propón y haz similitudes, propón ejemplos o cosas que ya se conozcan. Y el tiempo y la práctica hará el resto.

Por eso y concluyo con lo siguiente, la preparación de un temática a impartir no es lo importante. La preparación importante es crear el entorno o la situación para que el aprendizaje pueda surgir. Y los alumnos o los que están al otro lado de la sala, harán el resto.



miércoles, 7 de octubre de 2015

Jamás dejes de intentar poder hacer bien las cosas correctas



Después de dedicarle unas cuantas horas teóricas y prácticas, - ya que los libros y los papelotes son algo que sin entender el espíritu de la práctica no sirven absolutamente para nada - éstas últimas nos deben centrar en algún hábito saludable que intentemos tanto llevar al día a día como concienciar y convencer a otros para que si lo consideran oportuno - siguiendo su camino - lo lleven ellos también en la suya.

Una de esas claves que se podrían tener presente para intentar hacer eso para lo que somos profesionales, da igual el sector se podría resumir en lo siguiente:

(1) Se puede intentar hacer las cosas 

(2) Se puede intentar hacer las cosas correctas

(3) se puede intentar hacer bien las cosas correctas

Dichos puntos esconden para cualquier actividad que tengamos que hacer la esencia de la eficacia, eficiencia y efectividad. Algo que promueven las buenas prácticas.

Pero a todo esto añadiría un último punto de alguien que aprecio en demasía, no solamente por lo profesional, sino por cómo es en persona. Un gran amigo que sabe mucho de esto.

(4) Jamás dejes de intentar poder hacer bien las cosas correctas


Según sus palabras: "...no abandones principios, ni éticas, ni Morales por nada ni nadie. Podrás fluir con las tempestades, pero no dejes de ser tu. Y sobre todo, no intentes conseguir lo que sea como sea y a costa de quién sea".

Como dijo alguien a su señor,  mi apreciado amigo "... perdónales ya que no saben lo que hacen".

Para terminar y ahondar en esos principios comentaré algo que he leído ayer de un grande llamado César Piqueras de su libro 30 secretos de los mejores profesionales. Y versa sobre la problemática que tenemos actualmente con la ausencia de comunicación. Por ello, cuando queramos comunicar más que deber "CONVENCER" debemos "VENCER-CON". ¿Con quién? Con nuestros compañeros, amigos, proveedores, profesionales, con ellos a nivel de equipo.

Ya que sí queremos comunicar sin utilizar ética más que convencer lo que hacemos es manipular mientras que sí lo comunicado lo hacemos empleando la ética lo que conseguiremos es influir.


A veces las cosas que se reciben no tienen precio



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¿No crees?

domingo, 4 de octubre de 2015

¿Dónde está la información en el servicio?



Realmente está imperceptible para la visión global del servicio. Se puede apreciar en algún óptimo local. En algún residuo o cola de espera. Pero transversalmente no se aprecia. No se divisa su transformación. Su elaboración. Porque a medida que pasa de un estado a otro, está desaparece y aparece sin que haya una constancia en todo el sistema de su posición o lectura.

Y esta percepción hace mucho daño a la realidad. Ya que, el servicio encuentra resquicios de su falta de homogeneidad, de latencia, su irreflexivo flujo que debiere ser continuado solamente encuentra saltos y saltos en su devenir del avance de esa información vital para el que utiliza el servicio.

La información vital se enmascara en toda aquella gran cantidad de otras, inservibles para nuestro devenir que encima solamente nos quitan nuestro tiempo valioso de procesarlas. Por ello, no hay gestión de la misma. O no la hay como debiere. Sin esta gestión, el conocimiento generado es casi nulo e imperceptible.

Las horas de dedicación, de tiempo, son infructuosas para lo que realmente es necesario. Luego midiéndose algo que no genera ningún valor alguno pero que regocija a algunos con pensar y mostrar difundiendo algo que no tiene el mayor precio.

Con esta visión los marcos y métodos más que mejorar por esta forma de hacer empeoran la situación haciendo fuerte a la burocracia y a objetivos particulares de los propios reinos de taifas.

La principal problemática es que la gente se siente contenta con lo que hace y muestra cuando su valor, la auténtica transformación de esa información hacia su meta de forma eficaz, eficiente y efectiva realmente no importa.

Y sin recursos ni capacidades es muy difícil cambiar ni la visión, ni el método ni el generar un atisbo de esperanza llamada cultura de servicio. Es necesario un cambio radical. Pero el inmovilismo del sistema, lucha y fuerza a seguir siendo estáticos y hacer mínimos movimiento hacia adelante o hacia una mejora.

Por lo qué, ¿dónde reside la información en el servicio? Reside en lugares perdidos y en ningún sentido para lo cual fueron definidos y creados.


jueves, 1 de octubre de 2015

Historias de un educador salvaje


Juan López Aranguren en esta charla TEDxMadrid 2015 cuyo título se centra en "Historias de un educador salvaje" nos incide en que la improvisación y el estado de excepción las encuentra claves para una educación más moderna y efectiva.

En dicha charla se pueden encontrar diferentes ejemplos en el ámbito internacional en la que los espacios de la educación informal ofrecen información para la educación reglada donde se propone el patio de dichos centros como el espacio central de un nuevo proyecto de experimentación educativa.

Es algo que no tiene desperdicio. Es diruptivo e imaginativo donde la creación y la apertura de poner las condiciones de generar oportunidades no tiene límite.




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